Promovamos la igualdad en el servicio público
La igualdad en el servicio público es un derecho fundamental vinculado con la dignidad humana y es parte esencial del principio de respeto a los derechos humanos. Esto significa garantizar que todas las personas, sin importar su origen, género, discapacidad o religión, tengan acceso equitativo a los servicios y programas públicos, tanto en la letra de la ley como en la práctica cotidiana.
¿Qué implica realmente la igualdad?
Se trata de asegurar que todas y todos disfruten por igual de sus derechos. No se trata solo de tratar igual a todos, sino de garantizar que nadie quede excluido por motivos injustos.
¿Cómo podemos promoverla?
- Tratando con imparcialidad a todas las personas.
- Fomentando un ambiente inclusivo y respetuoso.
- Denunciando cualquier acto de discriminación.
¿Qué debemos evitar?
- Excluir a personas por razones como su género, origen, discapacidad o religión.
- Negar el acceso igualitario a los servicios públicos.
- Hacer comentarios que refuercen estereotipos.
Fomentar un entorno laboral y social basado en la equidad y el respeto es responsabilidad de todas y todos. Solo así construiremos un servicio público justo, incluyente y digno.
Fuente: Artículo 5, fracción I, del Código de Ética de la Administración Pública Federal y artículo 1, fracción VI, de la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación.